sábado, 3 de mayo de 2008

A las Barnas me fuí y de ellas huí.










Y regresamos a la espagne, más concretamente a Barcelona. ¿Ycuáles fueron mis primeras sensaciones?; mucho ruido, mucha gente que corre de lado a lado sin fijarse en nada, estrés, mucho estrés, que provoca este a su vez una bola de tensión contagiosa que contamina al pobre “tubab” que acaba de llegar del desierto. Pero no va a ser todo malo, esta es la tierra que me vio nacer, yo he vivido toda la vida en este país “desarrollado”, y hay cosas que no hay en otra parte, imágenes inolvidables, lugares únicos.
Y no hay nada como sumergirte entre la gente para ver un poco de todo, eso alegra el espíritu, y piensas que realmente no puede llegar a existir la globalización total, cada uno somos diferentes, y aunque nos cueste (a algunos), no podemos evitar demostrarlo.
Y que decir de las modas, extravagantes algunas, horteras otras, sensuales, locas, que si l@s ”fashions victims”, todo lleno de color y gustos de lo más dispar.
Y que decir de sus mujeres, hermosas todas ellas, hasta tuve la suerte de poder conocer más íntimamente a una de ellas, una bella compañera donde las haya, de carácter firme pero a la vez sensible, como a mí me gustan.

Por no hablar de los locales de ambiente, en los cuales te puedes encontrar un poco de todo, que si un concierto de cualquier tipo de música, saraos de lo más variopinto, “performances” de lo más contemporáneo, tanto que solo lo entiende su creador, y como yo estuve presente un mix, entre poesía y música, fue de lo más bizarro, y sorprendente a la vez.
Y arte, mucho arte por todas partes, Barcelona para mi es la ciudad con más arte urbano por metro cuadrado, hay de todo, y por todos lados.
Si no fuese tan caótica………, ya no sería Barcelona.

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